El hacendado de Zapotitán

Dentro de las leyendas de El Salvador también nos encontramos con personajes que en su vida terrenal hicieron pactos satánicos con el fin de obtener riquezas y riquezas para sobresalir entre la gente. La leyenda del hacendado de Zapotitán es una de estas historias que muy pocas personas conocen.

Se trata de una roca oscura con símbolos extraños y trozos de ladrillo del que fue el casco de la hacienda Zapotitán, en Ciudad Arce, son parte de la leyenda de Emeterio Ruano, según la cual, éste era un hacendado de la zona que hizo un «pacto con Satanás» a cambio de bienes materiales.

El hacendado de Zapotitán

Cuenta la leyenda que allá por 1860, Emeterio Ruano, un hombre muy pero muy ambicioso que era dueño de la hacienda Zapotitán, hizo un pacto con el diablo para hacerse rico; dicho pacto se realizó en una misteriosa piedra, en la que cada vez que recibía algo por el acuerdo con lucifer, viajaba a la piedra para recogerlo.

Esta misteriosa piedra mide 10 metros de ancho por 13 de largo, y en la cúspide tiene varios agujeros, dos de ellos con una circunferencia perfecta, donde se presume encontraba el oro o dinero que acordaba con el diablo.

En la peña está grabada la figura de una serpiente y un zapato que le pertenecía a Ruano. La leyenda es tan importante que la gente pidió que el cantón se llamara Cerro de Plata, por la plata que allí encontraba don Emeterio Ruano.

Cuentan también que en esta hacienda aparecían cercos de piedra que eran elaborados de la noche a la mañana y que estos cercos que también eran parte del pacto, eran tan finos que ni siquiera los animales podían pasar.

La historia también relata que la laguna que existía en el cantón fue secada por Ruano, y que para esconderse de los ladrones cuando iba a recoger lo que satanás le había dejado, caminaba un kilómetro y medio a través de un túnel secreto, que conectaba su casa con el sitio donde está la roca.

Cuentan que don Emeterio Ruano vivía constantemente en fiestas y acompañado de bellas mujeres. De su final no se sabe mucho, algunos dicen que murió asesinado pero otras personas comentan que desapareció porque el diablo se lo llevó debido al pacto que tenía con él. Lo cierto es que nadie sabe dónde está sepultado ni quienes fueron sus descendientes.

Luego de su desaparición decían que ahí en la hacienda asustaban, que oían llegar un caballo a la hacienda en las noches de luna…

Actualmente esta piedra es un patrimonio cultural de este lugar.


También podrías leer...

4 comentarios

  1. Eduardo de la Cotera dice:

    Don Emeterio fue casado con una tía,hermana de mi padre,su nombre, Adela Ruth Castro,fallecida muy joven por cáncer de mama. A raíz de esto, Dn Emeterio quedó muy triste y en una ocasion se emborracho en el casino de San Salvador, y fue sacado por los empleados, haciéndolo bajar por el graderío de servicio,con el objeto de evitar un escándalo social. Al salir por la puerta fue » asesinado » a balazos por un complotista, de quién me reservaré el nombre,pero era un estudiante de Derech o. El asesino fue a juicio, sin embargo, fue liberado de acuerdo al juez «por miedo insuperable»
    Su asesinato fue planeado para arrebatarle su fortuna,ya que no tuvo descendientes. Y así, todas sus propiedades,incluyendo Zapotitán, fue repartida para el beneficio de todos los que participaron del complot.
    Mal paga el diablo a quien le sirve, porque Zapotitán fue parcelada por la Reforma Agraria.

  2. Reiner Selasor dice:

    Interesante el comentario de Eduardo de la Cotera; «Don Emeterio fue casado con una tía,hermana de mi padre,su nombre, Adela Ruth Castro». Se que Adela Ruth Castro tuvo una hermana llamada Carmen Gavidia Castro, quien obviamente también fue hermana del padre de Eduardo. Quien fue el padre de Eduardo, hermano de Adela y Carmen Castro y cuñado de Oscar Emeterio Ruano? Porque Eduardo de la Cotera lleva este apellido cuando su padre es Castro, o es que tambien es Castro Guirola de la Cotera? Porque reserva Eduardo el nombre del «complotista» y obviamente habian mas? Quienes eran los otros en el complot? El cuento del comentarista, Eduardo es un » dicen que…» igual al cuento de El hacendado de Zapotitlan, el cual encuentro muy interesante, porque existen testigos y documentos sobre la muerte de Ruano y el juicio del acusado, y lo que cuenta Eduardo no fue así. Platiquemos mas, Eduardo.

  3. Jardín dice:

    Leyendas interesantes, en Usulután existe una muy interesante también, en la Hacienda la CONCORDIA EL DUEÑO ERA LINDER CASTRO. EL TÉRMINO EN UN CUARTO DE ALQUILAR EN EL CENTRO DE USULUTÁN, TENÍA COMO 16 HIJOS Y MURIÓ SOLO Y MUY CONSUMIDO A NADA…

  4. Ricardo Ayala K. dice:

    El que fue muerto por un Abogado de apellidos Rosales y Rosales en la entrada de un club social, ubicado contiguo y al sur del Teatro Nacional, fue Emeterito Ruano, hijo de don Emeterio, dueño de la hacienda Zapotitán la más grande del país a inicio del siglo 20. Las tumbas de ambos están en el Cementerio General de San Salvador, conocido como Los Ilustres. Don Emeterio y su familia vivían en una casa sobre la 6a Av. Sur, contiguo al Cine Libertad (antes Popular) y todavía están allí las letras ER sobr el zaguán. La comunidad capitalina siempre comentó que don Emeterio tenía «pacto con el diablo» y mencionan eso de la enorme piedra que aún existe en una zona en Zapotitán. No se conoce ningún estudio que al respecto haya hecho un historiador profesional sobre esta familia Ruano, que era de las más adineradas de El Salvador en el primer tercio del siglo 20.

contadores web